“Invertir en tecnología no genera grandes cambios, si no se transforman los modelos pedagógicos”

El especialista en nuevas tecnologías y educación, Dr. Cristóbal Cobo fue el segundo conferencista en “Pasar al Frente” donde expuso sobre conocimiento e información y cómo debe pensarse el aprendizaje en la actualidad.

Simulando un tradicional examen oral,  Cristóbal Cobo subió al escenario del Cine Arteón de Rosario para exponer durante 30 minutos acerca de las nuevas formas de valorar y reconocer el conocimiento. El jurado integrado por Dr. José Romero, Dr. Jorge Noro, Lic. Claudio Altisen y Mg. Fernando Irigaray, lo escuchó atentamente, luego lo interrogó y dictaminó su nota final.

El Dr. Cobo es director de la Fundación Ceibal (Uruguay) e investigador del Instituto de Internet de la Universidad de Oxford

Algunas de las reflexiones más sobresalientes del examen de Cristóbal Cobo:

Usos de las tecnologías: Las tecnologías se pueden utilizar para muchas cosas,  para hacer uso más eficiente de la entrega de contenidos, para simplificar la manera de interactuar con otros, para bajar los costos de distribución, en la educación formal el principal uso de la tecnología va en esa línea. Pero hay otra manera de usar la tecnología, para transformar, para transformar la manera en que nosotros accedemos, construimos y distribuimos conocimiento, para transformar la relación entre el estudiante y el docente, para transformar la relación entre las escuelas y la realidad. Pero esa relación transformadora muchas veces ocurre fuera del aula, ocurre en otros espacios. Y hoy sabemos que sin transformar los modelos pedagógicos, invertir en tecnología no genera grandes cambios. Hoy sabemos, a la luz de la evidencia, que la tecnología puede potenciar un buen docente, no hay duda de eso. Pero una tecnología no puede reemplazar una mala práctica pedagógica.

Ejes claves que habría que tener en cuenta en la escuela  de hoy:

La cultura del hacer: el sujeto que aprende no es un alumno, no es carente de luz, sino que es un creador, es una persona que está en un proceso permanente de exploración donde tiene un permiso para equivocarse.

La desobediencia tecnológica: utilizar y reconstruir la tecnología para fines distintos para las cuales fue creada.

Estimular el pensamiento computacional: no significa aprender a programar, sino que es una herramienta de pensamiento distinto, aprender a desarmar los problemas complejos en pequeños problemas, buscar similitudes, construir analogías.

Aprendizaje basado en proyectos: resolver problemas que son socialmente relevantes y que permitan a los jóvenes prepararse mejor para el mundo del trabajo y también para responder a las demandas de la ciudadanía.

Pedagogía entre pares:   aprender del otro y con el otro, eso implica tener las orejas más grandes y la boca más chica, la regla de oro de la colaboración, flexibilidad, no organizar los estudiantes por edad, sino por etapas de aprendizaje, no dividir la clase en 45 min o 60 min sino que en estadios de aprendizaje de exploración.

Evaluación versátil: la evaluación tiene que ser en tiempo real, no al final del proceso, tiene que ser social y adaptativa.

Diseñadores del conocimiento: El exceso de información es escasez de atención, y acumular información es liberarse de la incómoda tarea de pensar. Y lo creativo no está en acumular datos sino en aprender a organizarlos, a conectarlos, a jerarquizarlos. Necesitamos ser diseñadores de conocimiento en el actual laberinto de información en el que vivimos. Creo que  hay que aprender a desconectarse. Es una herramienta nueva, la capacidad de regular la sobreexposición que tenemos hoy día en este tsunami de datos digitales.

 

Pase al Frente es una iniciativa de nuestra Cátedra “Estudio y análisis prospectivo del paradigma para una nueva educación”  y la Cátedra del Diálogo y la Cultura del Encuentro.